25 de agosto de 2012 - Este sábado será memorable por el cúmulo de desaveniencias... De entrada, íbamos a quedar con un estudiante del Chacho que es de Santa Ana del Conde para visitar la casa de su abuela, pues la señora vive en un antiguo molino y la construcción promete bastante. Pero he aquí que el profe desmemoriado olvidó escribirle un correo a tiempo y claro, el del viernes a las tantas de la noche... ¡el muchacho no lo vio! Total, que acabamos paseando por el centro del pueblo (que no conocíamos, por cierto) donde se monta un mercadillo bastante interesante los sábados, precisamente. También estuvimos ojeando los servicios que se ofrecen, para cuando necesitemos algo de urgencia de la civilización.
El siguiente incidente fue el olvido de la cámara de fotos. Creo que Aliwen sí se acordó de llevarla, pero no supimos interpretar sus indicaciones. ¡Menudo cuarteto de cabezas pensantes!
Y para rematar, habíamos quedado con el ingeniero y su esposa para discutir algunos avances y retoques y... ¡llegaron como 40 minutos tarde porque ya se les había olvidado!
Bueno, y creo que finalmente no se me olvida ninguno de mis recuerdos, jijijijiji...